Los aspiradores y los coches proceden de antepasados comunes. Hay pruebas que lo demuestran:
Pruebas geográficas: Coches y aspiradores viven en zonas geográficas comunes.
Pruebas paleontológicas: Si estudiamos los registros fósiles, encontramos que ambos han evolucionado en potencia y ergonomía en épocas parecidas.
Pruebas embriológicas: Las dos especies en sus primeros estados embrionarios poseen estructuras básicas similares y su composición química es idéntica.
Pruebas anatómicas: Reconocemos en ambas especies órganos homólogos que nos orientan hacia ese pasado común: ruedas, color, forma, textura, alimentación.
Coches y aspiradores proceden de antepasados comunes, que en un determinado momento de su largo proceso evolutivo sufrieron una especiación bifurcándose así la linea evolutiva y evolucionando cada uno a su manera hasta llegar a nuestros días.
Nota: Aspiradores y coches no se pueden cruzar, son especies distintas.
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